La nueva ley australiana que prohíbe a las plataformas permitir cuentas a menores de 16 años entró en vigor este miércoles, con la promesa de proteger la salud mental de los adolescentes. Mientras los jóvenes buscan fórmulas para esquivar la norma, madres como Mireia Garriga apoyan la intención del gobierno, pero reclaman centrar la regulación en los algoritmos y en el contenido dañino, más que en cerrar cuentas.